La diatermia es una técnica no invasiva de tratamientos que consiste en la transferencia de corriente de alta frecuencia al interior del territorio corporal.
Dos modalidades de diatermia: capacitiva o resistiva:
– La diatermia capacitiva se utiliza para calentar los tejidos más superficiales.
– Por otro lado, está la diatermia resistiva trata los tejidos más profundos desde el interior.
Además, tiene muchas posibilidades de aplicación que dependerá de los parámetros que utilicemos cuando la apliquemos. Las ondas producidas tienen diversos efectos fisiológicos:
– Elevación de la temperatura en la profundidad de los tejidos.
– Analgesia tanto por elevación del umbral del dolor debido a la mayor presencia de endorfinas como al bloqueo de la sensación por el aumento de la temperatura.
– Vasodilatación y por tanto aumento del flujo sanguíneo sobre el territorio tratado.
– Efecto relajante.
– Efecto antiinflamatorio tanto por el aumento del drenaje como por el efecto trófico.
Todos estos efectos hacen que la diatermia actúe sobre nuestro organismo siendo efectiva sobre multitud de patologías dentro del campo traumatológico, deportivo, reumático etc…Las indicaciones de la diatermia son:
– Síndromes dolorosos neurológicos: neuralgia y neuritis. Ciáticas.
– Patología de la columna vertebral: dolores cervicales, dorsales y lumbares.
– Alteraciones musculares: contracturas, puntos gatillos, roturas fibrilares…
– Debido al efecto sobre la circulación, se puede utilizar para realizar drenajes linfáticos y venosos.
– Alteraciones articulares: artrosis, artritis. En algunas patologías reumáticas.